El diez de septiembre se cumplieron cinco años del artero asesinato del compañero Ricardo Mejía Samaniego. Aquél fatídico sábado 10 de septiembre de 2016, alrededor de las 7:30 de la mañana, un sicario lo acribilló con seis disparos. Esto sucedió en Lomas de San Sebastián, Los Reyes La Paz, estado de México, una de las zonas donde el compañero participaba destacadamente, en la organización de proyectos de vivienda y por la lucha de mejores servicios públicos.
Su asesinato se produjo en el contexto de una ofensiva territorial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Antorcha Popular y el ayuntamiento priísta de Los Reyes La Paz contra el movimiento independiente. Como en muchos otros crímenes realizados contra luchadores sociales no sólo sigue impune, sino que la investigación se encuentra estancada.