- El Plan Integral del Oriente beneficiará a más de 10 millones de personas con una inversión superior a 75 mil millones de pesos.
- Con el programa de Bacheo y Rehabilitación Vial se han atendido calles y avenidas, mejorando la movilidad y la seguridad vial en toda la entidad.
TOLUCA, Estado de México.– Durante su comparecencia ante la LXII Legislatura del Estado de México, como parte de la Glosa del Segundo Informe de Gobierno, el Secretario General de Gobierno, Horacio Duarte Olivares, destacó que una de cada dos familias mexiquenses recibe al menos un programa social estatal, lo que demuestra el alcance y la eficacia de la política social impulsada por la Gobernadora Delfina Gómez Álvarez.
El funcionario subrayó que los apoyos llegan de manera directa, sin intermediarios ni condicionamientos, y priorizan a mujeres, personas mayores, jóvenes y comunidades rurales que por años estuvieron al margen del desarrollo.
“La política social del Estado de México no es discurso, es una realidad. Son millones de historias de vida que demuestran que el dinero del pueblo regresa al pueblo”, afirmó Duarte Olivares.
Además, destacó la puesta en marcha del Plan Integral del Oriente, un proyecto que beneficiará a más de 10 millones de personas con líneas de acción enfocadas en infraestructura social, movilidad, vivienda, educación y salud, con una inversión superior a 75 mil millones de pesos.
En materia de infraestructura vial, informó que, gracias al programa estatal de Bacheo y Rehabilitación de Caminos, se han intervenido calles y avenidas, fortaleciendo la movilidad y mejorando las condiciones de tránsito en beneficio directo de millones de mexiquenses.
El Secretario General de Gobierno señaló también que la administración estatal ha logrado avances significativos en salud, educación, seguridad, medio ambiente y combate a la corrupción, consolidando la transformación de las instituciones públicas y el liderazgo de la Gobernadora Delfina Gómez como una mandataria de territorio y resultados.
El Gobierno del Estado de México refrenda su compromiso con la austeridad republicana y con un principio claro: los derechos no son privilegios. Cada peso del presupuesto público se destina a mejorar la vida de las y los mexiquenses, porque gobernar no es gastar más, sino gastar mejor.