Fuente: lajornada
Chimalhuacán, Méx., 10 de diciembre. El gobierno del estado de México inició el proceso de expropiación de 20 hectáreas del predio Mina Barrera de este municipio, donde pretende construir un depósito de basura que resolvería el conflicto entre los municipios de la zona oriente por el confinamiento final de desperdicios.
El alcalde Jesús Tolentino Román Bojórquez informó que la obra tendrá 20 celdas construidas a cien metros de profundidad. Cada una se edificará en 5 mil metros cuadrados a un costo de 15 millones de pesos. Los 300 millones de pesos que costará en total serán aportados por el gobierno del estado de México y nosotros lo administraríamos 30 años.
Román Bojórquez detalló que Mina Barrera es un predio enorme, pero en una de sus orillas hay 120 viviendas, que forman parte de las colonias Tepenepantla y La Copalera, que tendrían que ser reubicadas mediante un programa que permita dar a los afectados casas en una zona segura.
Los municipios de Chimalhuacán, La Paz y Nezahualcóyotl enfrentan problemas para la disposición final de la basura pues en octubre, septiembre y noviembre fueron clausurados los tiraderos municipales de Tlaltel Xochitenco, San Sebastián Chimalpa y Neza II, respectivamente.
Chimalhuacán deposita temporalmente en el relleno de Santa Catarina, mientras La Paz y Nezahualcóyotl lo hacen en un terreno acondicionado en el tiradero Neza III, el cual en 2007 fue parcialmente saneado por la dependencia ambiental mexiquense.
Aunque hay dos rellenos privados de reciente creación en Ixtapaluca y Chicoloapan, los gobiernos municipales, ejidatarios, pepenadores y habitantes de ambas localidades han anunciado que no permitirán el paso de los camiones de basura hasta que el gobierno estatal edifique vías de acceso y amplíe las carreteras que se encuentran saturadas por la sobrepoblación generada por la construcción de unidades habitacionales de inter,,0000és social.
Reabren tiradero en Naucalpan
En Naucalpan, este viernes los ejidatarios de Tepatlaxco permitieron reabrir el relleno sanitario de esa localidad luego que la empresa Servicios de Tecnología Ambiental (Setasa) aceptó pagarles 2.5 millones de pesos que les adeudaba por el arrendamiento de sus tierras. El dinero será repartidos entre los 425 labriegos.
Representantes de la alcaldía, de Setasa y Marcelino Santos Pliego, presidente del comisariado ejidal, suscribieron los acuerdos que permitieron reabrir el confinamiento cerrado la noche del 16 de noviembre pasado.
Santos Pliego recordó que en abril de 2006 el ejido rentó a Setasa 17.5 hectáreas para el relleno; la empresa no había pagado las rentas completas, por lo que bloquearon la entrada del vertedero.
La alcaldesa Azucena Olivares y representantes de Setasa suscribieron además un convenio por el cual el gobierno municipal se comprometió a pagar 54 millones de pesos como parte de los servicios que la empresa ha prestado al municipio por la disposición de 800 toneladas de basura al día.